Estamos a principios de la primavera de 2016 en el castillo de Windsor, donde Isabel II ultima los preparativos de las celebraciones de su nonagésimo aniversario, pero el ambiente festivo se trunca cuando uno de los invitados es hallado muerto en extrañas circunstancias en uno de los dormitorios de la residencia. Aunque todo parece indicar que Maksim Brodsky, un pianista ruso de veinticuatro años, se ha ahorcado, los mandos del MI5 sospechan de un complot internacional: ¿será la mafia rusa o el mismo Putin? ¿Los chinos? ¿Terroristas?
Al principio, la reina deja la investigación en manos de los profesionales, pero cuando las pesquisas apuntan hacia sus fieles sirvientes decide poner en práctica su pasión detectivesca y, con la ayuda de su secretaria personal, Rozie Oshodi, comienza sus indagaciones clandestinas.
Es un libro muy interesante, donde las averiguaciones sobre el caso se mezclan con personajes y hechos reales.
Lo recomendaría para grandes lectores a partir de 16 años, o para adultos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario