Se trata de una distopía en la que, como casi siempre, el planeta ha sido devastado por la acción del ser humano. En este caso, cinco personajes se encuentran en una nave de tratamiento de residuos altamente tóxicos. Los personajes, dos mujeres y tres hombres, hablan sobre los recuerdos de un mar en el que había peces, sobre una tierra en la que había árboles; hablan sobre la herencia que les han dejado sus antepasados y se enfrentan a un presente bastante desolador, no solo en lo que concierne al paisaje sino también a las relaciones afectivas.
Por otra parte, el ser humano, condenado por sí mismo, busca una redención que parece querer manifestarse a través de la locura, de la vida extraterrestre, de la propia capacidad de la Tierra para regenerarse, de la maternidad, del amor, de la amistad; de todo ello o de nada.
Obra interesante, aunque a veces da la impresión de que la autora se centra en el mensaje desatendiendo, para mi gusto, el valor estético.
Fragmento:
Isabel: Tranquila, la redención está cerca.
Ada: Cariño, no hay nadie más en este universo. Solo quedan desperdicios. Y la luna (sonríe con tristeza), un cementerio radioactivo (suspira). Si nuestros antepasados hubieran podido asomar la cabeza al futuro...
Isabel: ¿Tu crees que hubieran cambiado las cosas que hicieron?
A partir de 15 años.
Lugar y año de publicación: Madrid, 2016
No hay comentarios:
Publicar un comentario